A lo largo de este tiempo hemos aprendido que lo que realmente degrada la salud de una persona no son solo las drogas que consumen, sino la forma de consumo y el contexto en el que se realiza. También hemos aprendido que a toda persona consumidora de drogas le llega un momento en la vida en que algo le dice que tiene que cambiar de forma de vida, que tiene que cambiar si quiere seguir viviendo. Es un proceso que no se puede apurar, sencillamente llega, y ese momento hay que aprovecharlo, hay que estar ahí y apoyarlo más que nunca. Como nuestro ambiente de trabajo no es el más agradable, tenemos un pequeño truco para no caer en la desesperación: marcamos pequeños objetivos día a día, siendo conscientes de las limitaciones de las personas con las que trabajamos. Trabajamos en Oviedo, Gijón y la Cuenca del Nalón actualmente, pero hemos trabajado durante años también en Mieres y en Avilés, en estos momentos no acudimos a esas dos zonas dado que no se da este tipo de población. Cada año nuevo nos proponemos abarcar un poco más y seguimos buscando dónde podemos ser útiles ya que la situación socioeconómica actual amenaza con la exclusión social de muchas más personas. Para cubrir todas estas zonas, tan diferentes unas de otras, contamos con el trabajo de una Educadora Social.

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PROYECTO NACAI CALLE

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Desde el punto de vista metodológico, siempre nos gusta empezar con un párrafo, que resume a la perfección en lo que nos basamos para llevar a cabo nuestro trabajo. Es el sentir de una usuaria en concreto, pero bien podría ser el sentir de cualquiera de los chicos y chicas con los que contactamos en la calle:

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“(...) me parece importante puntualizar que los usuarios queremos ser protagonistas de nuestras vidas, dueños de nuestra salud, partícipes de nuestros tratamientos en todos los sentidos cualquiera que sea el que decidamos como el más adecuado para nosotros. Exigimos a los profesionales una relación más horizontal y abierta, ya que una persona que decide sobre su vida, su salud y los cambios que quiere realizar es más autónoma, se cree aquello que hace y es muy probable que lo consiga.”  Nora Olivera, Asociación ALBA.BCN.

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Nuestro trabajo consiste en acercarnos a aquellas personas que nunca utilizan los recursos. Somos el primer escalón de ascenso a los recursos normalizados. Intentamos que las personas consumidoras de drogas tengan la información necesaria y que sepan utilizarla cuando la necesiten, ya sea información sobre temas de salud o cómo llegar a la oficina de información al transeúnte, cómo acceder a programas o dónde solicitar el Salario Social. La totalidad de nuestro trabajo tiene lugar en la calle. Esto resulta muy complicado, pues tienes que resolver la situación que se plantee de forma inmediata porque, si no, corremos el riesgo de perder ese contacto. Nos adaptamos a cada persona porque cada uno de ellos se encuentra en un escalón diferente, y diferente debe ser nuestro trabajo con cada una de ellas. No con todas los/as participantes nos podemos marcar los mismos objetivos y de ahí aparece la definición que marca nuestro trabajo y es la exigencia adaptada. No todas las personas tienen los mismos objetivos y no seremos nosotras las que se los marquemos. Hay personas con las que el único objetivo posible es conseguir que se duchen y se cambien de ropa, otros que no orinen por los parques, y en el mejor de los casos podríamos marcarnos objetivos más ambiciosos, como intentar que ellos solos sepan moverse a la hora de solicitar cualquier recurso.

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OBJETIVOS​

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EDUCACIÓN PARA LA SALUD

• Reparto de material para inyección de drogas: Sanikits, agujas, jeringuillas, toallitas de alcohol...

• Reparto de preservativos, lubricantes y folletos sobre métodos anticonceptivos y enfermedades de transmisión sexual. Revisiones médicas: intentamos que tengan las vacunas al día y que acudan a sus citas con el médico de atención primaria, así como a citas en centros de salud mental.

• Higiene: neceseres con el utillaje básico para el aseo personal.

• Prevención de enfermedades de transmisión sexual prevención de riesgos asociados al consumo de drogas.

• Inyección segura.

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EDUCACIÓN CÍVICA

• Intentamos que sean conscientes que la calle es de todos y que hay que respetar a los demás, por ejemplo: no dar voces ni armar mucho ruido, no tirar las latas de cerveza al suelo, no escupir, no orinar por cualquier esquina...

• Pretendemos que tomen conciencia de la importancia de una buena higiene, aunque se esté en la calle, potenciando por nuestra parte mucho los recursos que ofrecen este tipo de servicio.

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INFORMACIÓN Y ORIENTACIÓN

• Sobre recursos y prestaciones.

• Dudas concretas: cómo se pide una vida laboral, dónde se puede hacer la prueba del VIH, dónde les ayudan a hacer el currículum vitae, que se muevan por los recursos de la cuidad...

• Intentamos que sean lo más autónomos y autónomas posible a la hora de moverse.

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OBJETIVOS ESPECÍFICOS

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• Promover estilos de vida que favorezcan la salud bio-psico-social.

• Favorecer la integración fomentando el uso normalizado de servicios que la comunidad ofrece.

• Involucrar a la persona en su proceso y capacitarla para que tome sus propias decisiones.

• Informar e involucrar en procesos de reinserción.

• Capacitar a la persona a que mejore la relación con los diferentes recursos y servicios y con los diferentes profesionales.

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FINANCIACIÓN​

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El proyecto está subvencionado por la Consejería de Sanidad del Principado de Asturias, para el que designan 27.000 euros al año.

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